lunes, 27 de septiembre de 2010

CUANDO LLEGA LA MENOPAUSIA

Se dice que la menopausia es un trastorno femenino que se da a partir de los 45 años, pero la verdad es que es una etapa natural de la mujer que puede variar entre los 43 y los 55 años. Esta se caracteriza por la suspensión del periodo menstrual, lo que origina la interrupción de sustancias importantes para el equilibrio hormonal. Como consecuencia, las mujeres sufren de cambios bruscos de temperatura, de carácter y a la larga la descalsificación ósea.
Lo primero que debemos saber para confirmar si hemos entrado en esta etapa es reconocer los síntomas más inmediatos; estos se van presentando por etapas. Al inicio los más comunes suelen ser bochornos, palpitaciones cardíacas, dolores de cabeza constantes, irritabilidad, insomnio, incremento del peso y cambios bruscos de ánimo. Existen más síntomas, pero no todos ellos los van a padecer; en la mayoría de casos, estos van apareciendo con el paso del tiempo. Un ejemplo de ello es el aumento del vello facial que se da a medida que la mujer avanza en edad, generalmente se empieza a notar cuando ha alcanzado los 65 años de edad. Esto también afecta la libido que se va perdiendo poco a poco.
A mediano plazo, la menopausia produce la pérdida del vello púbico y molestias a nivel vaginal, como sequedad, infecciones repetitivas y escozor en la vulva; como consecuencia, hay molestias durante las relaciones íntimas. Asimismo, a largo plazo nos genera osteoporosis, riesgo cardiovascular y riesgo de desarrollar Alzheimer. Para todos los casos se puede ayudar a controlar o evitar desarrollar alguno de ellos cambiando nuestros hábitos alimenticios.
Consumir soja en quesos, leche y comidas, ayuda a mantener los niveles naturales de estrógenos, básicos para prevenir la osteoporosis. Si a ello le sumas otros alimentos que provean calcio, como las almendras tostadas, la leche, el huevo y algunas legumbres, así como hacer ejercicios, la mejoría será notable y estarás más preparada para afrontar esta enfermedad cuando llegue.
Dejar los cigarrillos y el café, y utilizar ropas livianas, también te mantendrán más cómoda durante esta etapa. Para los cambios bruscos de humor, es mejor que apliques algunas técnicas de respiración y concentración. Pero si lo que necesitas son hormonas artificiales, es mejor consultar al médico.

EL OTOÑO Y NUESTRO ORGANISMO

En otoño los días se hacen más cortos, las horas de luz disminuyen y se produce un descenso de temperaturas que suelen provocar la aparición de algunas dolencias típicas de este periodo estacional, mayormente gripes y resfriados. Esto se debe a que el organismo intenta aclimatarse con un mayor consumo de energía, lo que provoca el descenso de la capacidad de defensa frente a virus y bacterias. Además, el cambio de estación influye en el estado anímico, ocasionando en este caso una sensación de tristeza conocida como el síndrome afectivo estacional o depresión otoñal. La reducción de horas de luz y el frío originan este trastorno que afecta a mujeres, sobre todo entre 25 y 45 años. Los síntomas más frecuentes son apatía, sensación de tristeza, etc. Dependiendo de la luz solar existente, el cerebro envía órdenes de ciertas hormonas, principalmente la melatonina, encargada de regular el sueño, la temperatura corporal y la sensación de hambre.
La producción de melatonina crece con la reducción de las horas de luz y este incremento provoca la reducción de la hormona de la felicidad: la serotonina. Si a esto le agregamos la ansiedad generada por la tristeza, facilita que nos asalte la tentación de recurrir a la comida como refugio y consecuentemente ganemos peso, lo que no beneficia en nada a nuestras defensas. Los mejores hábitos que debes observar durante el otoño son:
•Exponerte unos minutos al sol. Mínimo unos 10 minutos, mejor si es por la mañana, a las primeras horas. Así conservaras tus huesos sanos y conseguirás mantenerte optimista durante todo el día.
•Disfruta del paisaje otoñal y sal a pasear o apúntate al gimnasio. Lo importante es realizar ejercicio tanto para estar en forma como para reforzar el sistema circulatorio e inmunitario.
•Aprovecha las horas en casa para escuchar música, escribir, pintar y también descansar.

CONSEJOS PARA AUMENTAR NUESTRAS DEFENSAS

Las defensas bajas nos hacen más susceptibles a padecer enfermedades. Si este es tu caso debes modificar la lista de alimentos que consumes. Una buena alimentación que aporte todos los nutrientes y sin muchas grasas es la mejor manera de fortalecer nuestro sistema inmunológico. Está demostrado que si reducimos el contenido de grasa, la actividad inmunológica aumenta. Es cierto que las personas con sobrepeso se enferman con mayor frecuencia, pero también las que hacen dietas muy estrictas o las muy delgadas.
Por otro lado los excesos del verano también contribuyen a debilitar nuestras defensas, justo en el momento que más las necesitamos para enfrentarnos a los cambios de tiempo y al estrés laboral.
Como primera medida para proteger nuestro sistema inmunológico te aconsejamos tener en cuenta las siguientes pautas:
•Sigue una dieta variada, basada en alimentos frescos y ricos en vitaminas y minerales.
•Evita el tabaco y el alcohol.
•Cuando tomes una ducha alterna la temperatura del agua (fría y caliente). Estos cambios estimulan la circulación sanguínea y fortalecen las defensas del organismo.
•Plantas medicinales como la equinácea, tomillo, escaramujo, hojas de grosella negra o el espino amarillo son beneficiosas para nuestro sistema inmunológico. Consulta en una parafarmacia acerca de la mejor forma de ingerirlas (comprimidos, infusiones, etc).
•Duerme lo suficiente, ya que estudios muy recientes relacionan el sueño con nuestro sistema inmunológico. Recuerda que un buen descanso es sinónimo de salud física y emocional.
•Realiza una actividad física moderada de forma regular. Por ejemplo puedes caminar, nadar o montar bicicleta media hora todos los días o una hora en días alternos.
•Evita el estrés, uno de los principales enemigos de nuestro sistema inmune. Es esencial que aprendas a llevar un ritmo de vida más relajado. Si consideras que estás atravesando un periodo emocionalmente difícil conversa con un buen amigo y busca grupos de apoyo.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...