Nutricionistas expertos sugieren consumir siempre alimentos con un alto contenido en nutrientes y en agua para mejorar la fertilidad, principalmente alimentos integrales procedentes directamente de la tierra. A los pacientes que tratan de mejorar su fertilidad se les suele aconsejar una dieta que sigue las líneas de la alimentación mediterránea y basada en un 80% en vegetales debido a que ralentiza elfertilidad ritmo de envejecimiento y disminuye los riesgos de contraer determinadas enfermedades. Lo beneficiosos de este tipo de dieta es que mejora el estado de salud en general y la salud reproductiva en particular.
Hay también una serie de alimentos específicos que puedes tomar para mantener o incrementar tu fertilidad. Éstos son los recomendados para ello:
1. Cereales integrales: arroz y elaborados: Los carbohidratos refinados –piensa en el pan, el arroz o el azúcar llamados “blancos”- son los responsables en parte del incremento de los niveles de azúcares e insulina en sangre, lo que causa un desequilibrio en las hormonas y en las mujeres también un desequilibrio en los ciclos de ovulación. Los cereales integrales (arroz y similares) y los productos integrales (pan, azúcar moreno, etc.) no presentan este efecto negativo.
2. Carnes magras: El hierro es un nutriente importante para mantener la fertilidad y la forma más fácil de conseguir hierro mediante la alimentación es a través de la carne. Busca siempre carne magra y antes de cocinarla, quítale la grasa que pueda presentar. Y en todo caso, conviene tomarla cocida, horneada o a la plancha en vez de frita. Muchos estudios muestran que aquellas mujeres que incrementan su ingesta de hierro durante el período pre-conceptivo muestran unos niveles de fertilidad más altos que las mujeres deficitarias en hierro. Pero, llegados a este punto, conviene decir que tampoco es bueno exagerar ahora con el consumo de carne. Una ingesta excesiva no solo no ayudará a la fertilidad, sino que terminará por disminuirla. Para aquellas lectoras que sean vegetarianas, se recomienda la toma de vitaminas enriquecidas con hierro.
3. Pescado con Omega: El salmón, las sardinas, los jureles y cualquier otro tipo de pescado azul son excelentes para sustentar los niveles de fertilidad gracias a su alto contenido en ácidos grasos Omega-3. Éstos no sólo son beneficiosos para la circulación sanguínea, mejorando el aporte de sangre a los órganos reproductivo, también son fundamentales a la hora de regular las hormonas reproductivas. Las vegetarianas encontrarán ácidos grasos Omega-3 en la linaza, almendras, nueces y semillas de calabaza y huevos enriquecidos con DHA.
4. Lácteos ecológicos: La leche, el queso y otros productos lácteos son excelentes tanto para la salud de nuestros huesos como para la salud reproductiva. Algunos estudios han mostrado cómo las mujeres que tienen problemas con la ovulación pueden mejorarla con la ayuda de productos lácteos. Pero ojo, lácteos enteros, no desnatados.
5. Arándanos y frambuesas ecológicas: Todas las frutas y verduras en general son beneficiosas, pero estas bayas, especialmente si son de cultivo ecológico, son particularmente favorecedoras de la fertilidad. Están repletas de antioxidantes y protegen frente a los daños y el envejecimiento celular, inclusivo las células de tu sistema reproductivo y tus óvulos.
6. Tomar mucha más fibra: La fibra es instrumento para eliminar el exceso de estrógenos. La fibra incrementa la masa de lo que digieres, haciéndote también sentir saciada. Ayuda a prevenir los constipados además de hacer que la digestión de los alimentos siga su curso normal en el estómago y los fertilidadintestinos. Cuando se sigue una dieta con un bajo contenido en fibra se disminuye la velocidad de la digestión, lo que hace que los estrógenos permanezcan más tiempo en el estómago terminando por ser absorbidos de nuevo por el sistema circulatorio. Esta es la causa principal de unos niveles demasiado altos de estrógenos que presentan muchas mujeres.
Hay que prestar atención a las etiquetas con los ingredientes de lo que compramos y consumimos: la ingesta ideal o recomendada de fibra es de 25 gramos al día (esta es la cantidad recomendada para mujeres, para los hombres la ingesta diaria recomendada es de 38 gramos). A modo de ejemplo, una mujer de mediana edad ingiere solamente la mitad de esa cantidad recomendada.
Si estás entre las que consumen poca fibra, lo más recomendable es ir aumentado poco a poco las cantidades a lo largo de 3 semanas hasta llegar al óptimo. Se pueden usar complementos alimenticios pero es mucho más recomendable obtener la fibra que necesitamos directamente de los alimentos por diversas razones: por un lado, los alimentos ricos en fibra son también beneficiosos en todos los demás aspectos (caso de frutas y verduras, fuente de muchas vitaminas). Por otro lado, puedes controlar la ingesta de fibra mediante la toma diaria de varias piezas de fruta y de verdura, mucho mejor que atiborrarte de una sola vez a base de pastillas complementarias.